APEGO INFANTIL

                               APEGO INFANTIL




¿Qué es el apego?

El apego infantil es el vínculo que desarrolló los niños con sus cuidadores, en primer lugar, con los padres y, después, puede extenderse a otros cuidadores de segundo grado tales como familiares o docentes.  Este vínculo ayuda al infante a relacionarse con el entorno, explorar, comprender y regular sus emociones y validar sus conductas, entre otras cosas. Que el vínculo se establezca de forma segura es de suma importancia para que el niño o niña aprenda a regular sus conductas, emociones, aprenda a enfrentarse a nuevos retos, a tolerar la frustración ya establecer relaciones con interpersonales. Que el niño y/o la niña se sienta seguro o segura al explorar el ambiente y cuente con el apoyo de los cuidadores en los momentos de mayor incertidumbre es lo que facilita que el vínculo sea seguro; Si esto no es así, estaríamos frente a un apego inseguro que dificulta el correcto desarrollo y puede tener serias implicaciones en el desarrollo emocional y de la personalidad.


Tipos de apego infantil

Según los vínculos que se establecen con los cuidadores se pueden encontrar 4 tipos de apego infantil (Hernández, 2020):

  • Apego evitativo o tipo A : El vínculo carece de afectividad o bien los cuidadores muestran desinterés (o falta de voluntad) en invertir tiempo con el niño/a. Quién ha crecido con este apego, puede inhibir respuestas afectivas negativas, intenta “no ser una molestia para sus padres” y pueden evitar el contacto social. En la adultez, pretenderán tener todo bajo control e intentarán actuar en base a lo que creen que otros quieren (puede darse cuenta de un efecto contrario con personalidad más narcisista).
  • Apego seguro o tipo B : Vínculo sano entre niño/ay cuidadores que implica un desarrollo más equilibrado, una mayor exploración del entorno y mejor autorregulación de conductas y emociones. En la adultez, estas personas pueden enfrentarse a situaciones de estrés elaborando respuestas equilibradas.
  • Apego ambivalente o tipo C : Este vínculo se caracteriza por la incapacidad de los cuidadores de invertir energía en los niños/as; Éstos se esfuerzan en ser buenos progenitores, pero con recursos inadecuados o respuestas incoherentes (como por ejemplo castigos desproporcionados e inmediatamente afecto). En la adultez se dejan llevar mucho por las emociones, por encima de lo racional; les cuesta planificar ante la incertidumbre y aprender a alternar emociones de cólera y sumisión.
  • Apego desorganizado o tipo D : El/los cuidador/es invierten poco en el niño/ao bien la figura de apego es fuente de maltrato o miedo, el niño y/o niña invierte mucha energía en mecanismos de defensa, siente que las personas que Deben protegerle a su hijo fuente de amenaza. En la adultez son personas problemáticas con situaciones de riesgo, pudiendo desarrollarse trastornos tales como el trastorno límite de la personalidad y/o conductas antisociales.


  • La importancia del apego seguro en el desarrollo infantil

    Establecer unas bases de apego seguro es fundamental para el desarrollo no solo infantil, sino a lo largo de toda la vida de la persona, ya que nos ayuda a comprender el entorno y las relaciones con otros de una forma equilibrada y saludable, ayudando en el desarrollo de capacidades tales como:

    • Regulación emocional
    • Gestión del estrés
    • Ansiedad y frustración
    • Planificación
    • Afrontamiento de nuevos retos
    • Comprensión de las emociones del otro.

    Llegados a este punto nos planteamos cómo puede afectar la falta de apego seguro en la infancia y cuáles son las consecuencias de un apego inseguro en un niño y/o niña. Desarrollar un apego inseguro puede tener diversas consecuencias en el desarrollo del niño/a, adolescente y adulto. Éstas pueden ir desde dificultades en la gestión emocional hasta patologías como trastornos de personalidad, del humor, adicciones y otros trastornos relacionados con la ansiedad como el Trastorno Obsesivo Compulsivo.

    Es importante tener en cuenta que los aprendizajes desde nuestras primeras etapas de vida afectan a nuestras decisiones y comportamientos en el futuro (así como a nuestra forma de interpretar la situación y hacer predicciones), por lo que tener un apego inseguro puede hacer que tengamos una mayor tendencia a evitar ciertas situaciones, a necesitar controlar lo que nos rodea, a ser más o menos afectivos.




No comments:

Post a Comment

Déjanos un mensaje......

Adbox